Los bots son programas que realizan tareas predefinidas de forma automatizada. Su objetivo es ejecutar una serie de contenidos o respuestas en internet, ya sea en páginas, chats, redes sociales o foros.
Sus labores son tan repetitivas que están diseñadas para suplir el actuar humano en un periodo mucho más corto de tiempo. Para una persona sería tedioso realizar la misma encomienda una y otra vez por sencilla que parezca, lo que probablemente tendría un efecto contrario al esperado.
Con esta breve descripción queda más que claro que la palabra bot proviene de ‘robot’, aunque para términos prácticos podemos entender este concepto como una herramienta digital.
¿Cuáles son los bots buenos y los bots malos?
Aunque los bots cumplen su misión de forma automática, siempre son mediados por una o varias personas. Y por ello, pueden estar programados para ayudar o dañar.
Los primeros desempeñan funciones útiles para los usuarios. Por ejemplo, realizar un envío masivo de correos corporativos, atención al cliente, corregir o hacer predicciones de textos y más.
Estos son algunos de los bots buenos más usados en internet:
Crawlers o arañas web
Son programas informáticos que analizan páginas web de forma automatizada para después clasificarlas según un determinado algoritmo. El ejemplo más claro es el algoritmo de Google, que de acuerdo con sus propios parámetros indexa en las primeras posiciones a quienes cumplan con cierto tiempo de permanencia, palabras clave, entre otras cuestiones.
Chatbots
Seguramente has entrado al sitio web en busca de un producto y de la nada se abre una ventana que te pregunta si necesitas ayuda. Quizá no lo notaste pero, aunque sus respuestas aparentaban ser muy naturales, muy probablemente se trataba de un bot.
Los chatbots están basados en Inteligencia Artificial, Procesamiento de Lenguaje Natural y Aprendizaje Automático.
Asistentes virtuales
Siri, Cortana, Google Now son algunos de los asistentes virtuales más comunes. Están diseñados para comprender las preguntas realizadas por los usuarios y ejecutar tareas que les soliciten como poner una canción, activar una alarma o responder alguna curiosidad cuya respuesta está en internet.
A diferencia de estos, también podemos encontrar a los bots maliciosos que son un tipo de malware capaz de autorreplicarse millones de veces para robar información confidencial como contraseñas, información bancaria o médica. De igual manera pueden ejecutar ataques de phishing, transmitir spam o efectuar ataques de Denegación de Servicio.
Estos son algunos de los más comunes:
Bots para ataque DDoS
Un ataque DDoS o de Denegación de Servicio ocurre cuando se envían más solicitudes de los que una web puede procesar con el objetivo de tirarla y dejarla inaccesible.
Comúnmente estas peticiones se realizan desde una red gigantesca de bots. En ocasiones, los atacantes exigen una cantidad de dinero para detener el ataque.
Spambots
Los spambots se encargan de enviar mails a miles de correos en los que pueden hacerse pasar por una institución fidedigna con la intención de que los usuarios compartan su información personal. Así como pueden ser utilizados con fines publicitarios también pueden ser estafas.
Buscadores de vulnerabilidades
Estos bots analizan millones de sitios en busca de vulnerabilidades y al encontrarlas las comunican con sus creadores para vender dicha información o hackearlos.
¿Cómo protegerte de los bots malos?
Para evitar caer en los bots maliciosos se recomienda mantenerse al día en cuanto a las actualizaciones del antivirus. De igual manera, utilizar herramientas de gestión de tráfico como un WAF ayudará a monitorear y mitigar las amenazas.
Por último pero no menos importante, fomentar una cultura laboral en cuanto a los bots buenos y los malos es esencial para que la organización utilice cada recurso a consciencia.
En Grupo Electrodata, contamos con soluciones para proteger tu organización, para mayor información escríbenos a: marketing@electrodata.com.pe y un especialista te atenderá.